La reacción de los medios y algún Partido, a propósito de las opiniones vertidas por Fernández Díaz en un coloquio, se me antoja desmesurada. Ni sus palabras suponen la grave ofensa que algunos quieren sugerir, ni en la situación actual parece ese contencioso una prioridad.
Afirmó que existen argumentos racionales para cuestionar el matrimonio entre personas del mismo sexo y que, de extenderse tal opción -es lo que entendí-, la pervivencia de la especie no estaría garantizada. Más allá del chiste, siempre pueden buscarse razones a la medida de cualquier apriorismo, la pervivencia de la especie y sus amenazas darían para un largo debate y, de entrada, no aprecio un agravio de tal magnitud que justifique emplear un tiempo precioso -caso de I.U- en recoger firmas para exigir su dimisión.
La ponderación debiera primar por sobre los enconos para no amplificar el eco de una opinión que en mi criterio no merece tanto espacio mediático. ¡Cualquiera diría que se esté falto de asuntos de mayor calado! Si I.U quiere un listado, quedo a su disposición. Y firmaría en Internet por otras dimisiones más urgentes.
Contar es vivir (te) 
En pocas palabras, que no vale la pena criticar ni pedir la dimisión a ministros por demostrar ignorancia en cuestiones elementales, o poca sensibilidad ante asuntos que afectan a derechos fundamentales (dictaminar el tamaño de la ofensa en cualquier caso se me antoja derecho de los ofendidos) . Pues nada, a esperar a que el próximo ministro de turno diga que la economía no se resentiría por enseñar creacionismo en las escuelas (este ministro probablemente lo suscribiría) o que el sol gira alrededor de la tierra (como afirmó hace unos días un matemático ultracatólico de la Universidad de, creo, Navarra)!
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Comparto su opinión. estoy hasta las narices de polémicas ridículas, de maniobras de despiste y de pedir cada dia dimisiones por culaquier chorrada. somos adultos y queremos hablar de temas seerios
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Era esperable, este y todos sus compañeros de gabinete comulgan con la misma Hostia (mala). Y del jefe de la banda, no digamos…Cualquier cosa habla por si misma. Les ha sorprendido el gobierno de cuatro años, y en ese tiempo quieren desmontar 60 años de lucha y consecuciones. Sigamos perseverando, no queda otro consuelo.
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Considerant que la població humana actualment creix de forma exponencial a raó de 1000 milions per dècada (clar que no hem conseguit que siguin tots espanyolets, ni tan sols amb les polítiques de torn per incentivar la natalitat) i que consumeix el 35% del total dels recursos utilitzats per totes les espècies vivents, m’atreviria a afirmar que existeixen arguments racionals per qüestionar el matrimoni entre persones de distint sexe ja que de seguir a aquest ritme d’increment poblacional no està garantida la pervivència de l’espècie.
Clar que sempre podrem colonitzar altres planetes i això sí, tots heterosexuals.
Una gran aportació la del ministre, que convida a la reflexió i a pensar si realment és conscient del que ha dit.
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Bueno, entre poc y massa… Pese a todo, creo que lo que debe propugnarse es un debate con el ministro a tumba abierta aunque, como interlocutores, no sólo los de la LGTB, con similares sesgos que el denunciado.
Por cierto, Margalida: yo creo que te conozco.
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